De la antigüedad, pasando por el marxismo, llegamos al “woke”: materialismo, ateísmo, relativismo ético (parte I)
Por Gabriel Ugarte
En las siguientes columnas llegaremos al punto de demostrar como la cultura “woke” no es sino un hito de la cultura materialista, atea, antirreligiosa, relativista ética cuyo fin es destruir las bases originales de la cultura occidental y que tiene raíces en siglos atrás.
Es mi intención tratar en tres columnas el Materialismo, el Ateísmo, el Relativismo Ético llegando a la cultura “Woke” de enorme impacto en nuestra cultura actual que empezó a echar raíces en los años sesenta con la revolución sexual, el mayo francés de 1968 y las protestas contra la guerra de Vietnam.
El materialismo, ateísmo, anti religión y relativismo ético nacieron juntos desde algunos filósofos griegos. El más destacado es sin duda el romano Tito Lucrecio Caro, más conocido como Lucrecio que nació en año 99 ac y falleció en 55 ac. Contemporáneo de Cicerón, aunque mantuvo correspondencia con él, tenían una distancia filosófica dado que Cicerón en su obra “De natura deorum” sostuvo que los humanos éramos una “chispa o astillada saltada de Dios”.
Pero Lucrecio se sostiene en las enseñanzas de los filósofos griegos Epicuro y Demócrito. Se sentaron que el mundo era solo materia, la creación como un azar, la no existencia de una vida más allá de la física y de un relativismo. Epicuro en su carta a Meneceo, mejor conocida como “Carta sobre la Felicidad” reconoce tres placeres naturales y necesarios: comer, beber y abrigarse del frío. Aunque no debemos a la simplificación que se ha hecho de estas afirmaciones si es cierto que todos los valores más importantes se refieren a la vida física.
Por su lucha contra la religión, Marx señalaba a Epicuro como el más grande racionalista griego. Lo que a Marx le fascinaba de Epicuro era su «principio energético» al postular una filosofía que luchaba contra aquella.
El poeta y filósofo español George Santayana considera al filósofo romano Lucrecio como «el auténtico creador del materialismo científico”. Karl Marx realizó su tesis doctoral Diferencia de la filosofía de la Naturaleza en Demócrito y Epicuro” también Epicuro al cual Diferencia de la filosofía de la Naturaleza en Demócrito y Epicuro, El joven Karl Marx contaba con 24 años cuando se presentó a defender su doctorado en la Universidad de Jena -año 1841- reivindica a Lucrecio señalando que fue el único que entendió la física de Epicuro.
Expertos señalan que el interés de Marx por el materialismo antiguo se produjese a causa de sus lecturas de Espinosa. Espinosa en su Epístola LVI dirigida a Hugo Boxel (personalidad de los Países Bajos) escrita en 1674 en la que sostiene: «La autoridad de Platón, de Aristóteles y de Sócrates no vale mucho para mí. Me hubiera admirado que usted hubiera aducido a Epicuro, Demócrito, Lucrecio o a alguno de los atomistas o defensores de los átomos. Pues no es de extrañar que aquellos que han inventado las cualidades ocultas, las especies intencionales, las formas sustanciales y otras mil tonterías, hayan excogitado los espectros y duendes y que hayan creído a las vejezuelas, con lo que aumentaron la autoridad de Demócrito, cuya buena fama envidiaron tanto que llegaron a quemar todos los libros que él había editado con tanto encomio»
Dejaremos para las otras columnas el materialismo y ateísmo en el Renacimiento y la Ilustración y abordemos algunas importantes afirmaciones del marxismo sobre el hombre, su naturaleza, su origen y valores.
Federico Engels, compañero de Karl Marx, en su obra “La Dialéctica de la Naturaleza” mantuvo: “La gran pregunta básica de toda filosofía, especialmente de la filosofía moderna, es la relativa a la relación entre pensar y ser… ese interrogante… tornó más agudo al derivar en éste: ¿Creó Dios el mundo o éste ha existido eternamente? La respuesta que los filósofos dieron a esta pregunta los dividió en dos grandes campos”. (3)
Por su parte Karl Marx (1844) en su obra “Crítica de la filosofía del derecho de Hegel” escribió: “ La guerra contra la religión es, entonces, directamente, la lucha contra aquel mundo, cuyo aroma moral es la religión. La miseria religiosa es, por una parte, la expresión de la miseria real y, por la otra, la protesta contra la miseria real. La religión es el suspiro de la criatura oprimida, el corazón de un mundo sin corazón, así como es el espíritu de una situación carente de espíritu. Es el opio del pueblo”
En otro texto afirmó que «El trabajo… es la primera condición fundamental de toda vida humana, hasta tal punto en que, en cierto sentido, debelamos decir que el hombre mismo ha sido creado por él». () Podemos ver así que el trabajo es el “Creador” en la visión marxista centrada en el materialismo dialéctico e histórico.”.
En el diccionario filosófico abreviado de la Academia de Ciencias de la Unión Soviética editado en 1959 es tal vez lo más claro que se puede leer sobre la visión materialista del marxismo. En ese diccionario se dice: “Hábito de trabajar, cualidad moral del trabajador; es uno de los principios del código moral de quienes forjan el comunismo. Comunismo y trabajo son inseparables… Educar en el sentido de fomentar el amor al trabajo contribuye a convertir este último en la primera necesidad vital del hombre”.
Aunque la perspectiva materialista y atea no surgió con Marx y Engels ellos fueron más que nadie la cúspide de esa ideología. Nada existe fuera del mundo físico. El propósito de la vida de los seres humanos es cambiar las condiciones de formas de producción hasta crear la sociedad comunista donde las satisfacciones materiales estén realizadas.
Demostraremos en las siguientes columnas como la cultura “woke” no es sino un hito de la cultura materialista, atea, antirreligiosa, relativista ética cuyo fin es destruir las bases originales de la cultura occidental basada en la tradición judeocristiana, los filósofos griegos como Sócrates, Platón y Aristóteles, los pensadores y científicos del Renacimiento y la Ilustración creyentes, los grande líderes religiosos y espirituales del Siglo XIX y XX y los científicos de la física, matemáticas y la Neurofisiología, entre muchos otros fenómenos y áreas que podríamos citar.